Páginas

jueves, 29 de abril de 2010

¿Es que existe otra forma de querer distinta a clavar astros en la nada?

¿Es que vive, a grosso modo, un lenguaje diferente al del cadáver que sabe del beber?

¿En verdad, es posible otra forma de atar distintas cuerdas a la almohada del rozar?

No hay comentarios: